La enseñanza aeronaval y sus primeros aviones de instrucción



Antecedentes de la Aviación Naval
 

Remontándonos en la historia, encontramos que el primer marino oriental en obtener un título que lo habilitaba en prácticas relativas al vuelo, fue el entonces Capitán (de la Marina Imperial Alemana) Francisco Ruette, quien el 22 de setiembre de 1911 obtuvo en la ciudad de Berlín, Alemania, el brevet de piloto de globo libre. En los años siguientes y ya como Comandante de nuestro crucero “Uruguay”, se transformaría en vital impulsor para la creación de un parque de aviación a realizar. En ese orden lo seguiría el entonces A/N Atilio Frigerio, figura de enorme destaque para nuestra aviación nacional y fundador de la Aviación Naval, quien en la ciudad de Aviano (Italia) obtuvo el título de Piloto Aviador el 8 de agosto de 1912. Da ahí para adelante, dedicaría su carrera y su vida por entero a su gran pasión, la aviación.

A partir del 7 de febrero de 1925 queda oficialmente creado el “Servicio Aeronáutico de la Armada”. Su primer sede y a la vez salón de aulas, era una pequeña habitación en el entonces Ministerio de Guerra y Marina.

 

Brevet de Aeróstato del C/F Francisco Ruete

de "Aportes para la Historia de la Fuerza Aérea Uruguaya,

de Jaime Meregalli y Luis Bernasconi

Foto de "Aportes para la Hist... (Op.Cit.)
Atilio Frigerio

  Como dato anecdótico cabe señalar que aquella primera aula sería designada por iniciativa del Capitán Frigerio -primer Jefe del Servicio– con el nombre de “Capitán Boiso Lanza”. De esa forma se le tributaba homenaje al gran piloto militar uruguayo, primer mártir de nuestras alas, muerto en campos de Francia.
En aquella primera etapa las clases serían dedicadas a la formación de personal técnico, con vista a la reparación y mantenimiento de las todavía inexistentes aeronaves.

Al llegar 1926, se decide la formación de un primer grupo de pilotos para el servicio. Es así que se destinan a la Escuela Militar de Aviación a los S/O Alberto Ciganda, Anacleto Castillo Aire, y Estanislao Petrarca, quienes en ese año obtendrían el brevet de Piloto Aviador de Tropa (Reserva).

 

Foto gentileza de Raul Petrarca, vía Wilman Fuentes

Estanislao Petrarca y un Avro 504K

Estos sub-oficiales se transformaban así en los primeros pilotos del Servicio Aeronaval, y esto se explica porque en aquella época nuestra Marina Militar contaba con pocos oficiales, los que eran destinados a cubrir los puestos en las unidades navales flotantes, y no como en este caso en servicios que todavía se consideraban casi experimentales y aún no enteramente aceptados.

Al año siguiente y gracias a la persistente lucha de sus principales figuras, se logra enviar a la Escuela Militar de Aviación una primera tanda de oficiales, que estaba formada los GG/MN Horacio Bogarín, Clemente Pradines Brazil, Leopoldo Otero Torrens y Juan Deambrosio, quienes hoy reciben la reverencia ganada por sus logros en bien de la institución. Estos oficiales recibirían durante 1927 su brevet de Piloto Aviador, en la Escuela Militar de Aviación.

G/M Julio C. Poussin, G/M Horacio Bogarín, G/M Juan C. Deambrosio, G/M Leopoldo Otero, G/M Clemente Pradines

de "Aportes para la Historia de la Fuerza Aérea Uruguaya, de Jaime Meregalli y Luis Bernasconi

Durante 1928 otro grupo se sumaría a los anteriores, esta vez compuesto por los GG/MM Washington Marroche, Carlos A. Curbelo y Mario Botto. Los tres obtendrían ese mismo ese año el brevet de Piloto Aviador, y posteriormente, en 1930, el de Piloto Aviador Militar.

Llega 1930, y un acontecimiento ansiosamente esperado: el arribo de las primeras aeronaves para el Servicio Aéreo.

CANT 18 en el hangar de la Isla Libertad

(ver página de los CANT 18 y 21)

 

Washington Marroche, Glauco Larre Borges, Carlos Curbelo, y Mario Botto

foto Museo Aeronáutico

El material en cuestión eran dos hidros de origen italiano, un CANT 18 y un CANT 21. Este hecho facilitaba, entre otras cosas, la posibilidad de impartir clases de vuelo al personal con instructores y aeronaves propias, cosa que hasta ese momento no se había podido realizar. El primer oficial en recibir instrucción en ese tipo de aeronaves fue el entonces A/N Carlos Curbelo, quien de esa manera no solo se transformaba en primer piloto de los CANT, sino a posteriori en primer instructor de sus compañeros.

CANT 21   perfil diseñado por Los CerovazA partir de ese año y por más de una década, el Servicio Aeronaval pasaría por un difícil período que pondría a prueba su temple y a su vez la capacidad de sus hombres para mantenerlo en píe.

Prácticamente desde 1930 a 1940, se debe luchar con los mismos elementos aéreos y casi sin ningún ingreso de personal. Unicamente durante 1930, fueron enviados a España los AA/NN Julio Poussin y Horacio Bogarín, quienes recibirían en el año 1931 el título de Pilotos de Hidroavión.
Luego de lo anterior, recién en 1939, se produce el envío de los GG/MM Miguel Cabrera, Omar Aguirre y Luis Lluveras a la Escuela Militar de Aeronáutica, y al año siguiente se daría el mismo destino a los también GG/MM Carlos Mari, C. Canfield y Gastón Larrañaga.


Los Fairchild PT-23, PT-19 y PT-26

A través de lo anterior, hemos visto que nuestra Aviación Naval, en sus primeros años de vida, recibió un constante apoyo por parte del arma aérea de nuestro Ejército, y también de países amigos, para la formación de sus pilotos. Luego, buscando la independencia del Servicio, se fue logrando de a poco ir adquiriendo el material para lograr ese fin. Es aquí que encontramos que durante el Comando del entonces C/F Julio Poussin (1938–1942), se adquieren los primeros aviones con los cuales se lograría la preparación básica de los pilotos navales. Las aeronaves elegidas serían los Fairchild PT-23.

Estas aeronaves habían sido diseñadas en base al modelo del entrenador Fairchild M-62 y aceptadas por el Cuerpo Aéreo del Ejército de los Estados Unidos durante 1940, como el modelo PT-19, con motor lineal Ranger L-440. En ese año fueron incorporadas 275 unidades y durante 1941, 3181 fabricadas por la Fairchild, 477 por Aeronca y 44 por St. Louis Aircraft. En los años siguientes y debido a problemas para dotar a los aviones con motores lineales, se debió empezar a equiparlos con motores radiales Continental R-670-11 de 220 hp, designándolos como PT-23. De este tipo, nuestro país recibiría tres ejemplares. Posteriormente estos aviones serían modificados para utilizar los motores lineales, quedando así convertidos en PT-19.

Otros países usuarios de los PT-19 y 23 fueron Inglaterra y Canadá. Este último los fabricó en la variante de PT-26, designándolos como Cornell I y II. La Aeronáutica Militar de nuestro país, luego Fuerza Aérea Uruguaya, también utilizó los PT-19 en la formación de sus pilotos.
 


Los primeros vuelos en Melilla y en Boiso Lanza

La década de los años cuarenta, a diferencia de la anterior, se transformaría en una etapa de grandes conquistas para los hombres de la Aviación Naval. Desde el punto de vista del material, se lograba la incorporación durante 1942 de seis hidros “Sikorsky” OS2U-3, a los cuales se sumaron durante 1943 un “Grumman” J4F y tres aviones Fairchild PT-23.

foto Armada NacionalEn lo edilicio se completaban las obras de un hangar de material en la Isla Libertad, y en cuanto a personal se enviaban oficiales a realizar cursos en la Escuela Militar de Aeronáutica, mientras que a la Aviación Militar Argentina fueron destinados los TT/NN Carlos Curbelo y Horacio Bogarín. A esto se agregaba la incorporación de oficiales ingenieros y personal especializado de tropa, y una amplia colaboración de los Estados Unidos en la concesión de becas para la instrucción de vuelo y para técnicos.

Ya se había logrado la consolidación. Es así que se da al servicio un ordenamiento que le permite cumplir a satisfacción con las tareas asignadas. En pos de ese objetivo se dispone la Isla Libertad como sede de los aviones de patrulla y observación Sikorsky y Grumman, y desde 1944 al aeródromo civil de Melilla Ángel S. Adami (provisoriamente ya que se trataba de un aeródromo civil) como primer sede de la novel Escuela de Aviación Naval. La misma contaría con tres aviones Fairchild PT-23, equipados con un motor Continental radial de 200 HP, estructura de tela y tren de aterrizaje fijo, con capacidad de dos tripulantes dispuestos en tandem en cabinas abiertas.

Como dato anecdótico, cabe mencionar que los PT-23 venían encajonados, y que luego de retirarlos de sus embalajes y procederse a su armado, los cajones fueron adaptados en forma muy ingeniosa como primeros alojamientos de la nueva unidad aeronaval.

PT-23   perfiles de Los Cerovaz

Ya se encontraba todo listo y se comenzó con los vuelos de los PT.

Es así que encontramos que el 7 de agosto de 1944 y con el mando del T/N Omar Aguirre acompañado por el A/N Carlos Martínez Labadie, se prueba el Fairchild matriculado EE-1 (según los protagonistas dicha designación correspondía a Escuela de Especialización). Posteriormente ese mismo día le tocaría el turno al PT-23 EE-3 que realizó su primer vuelo con el T/N Miguel Cabrera acompañado por el G/M Carlos Fernández. Por último, el 5 de setiembre de 1944, se completaban los vuelos de prueba con el EE-2, otra vez con el pilotaje del T/N Miguel Cabrera.

En forma paralela y a partir del 15 de agosto se comenzaba la instrucción de los primeros alumnos navales a ser adiestrados desde el principio en aviones navales y a cargo de instructores navales. Los dos oficiales en tener ese privilegio fueron los GG/MM Gustavo Mestre y Sarandí Araújo, que recibirían sus primeras enseñanzas a bordo del EE-3 y con el T/N Miguel Cabrera como instructor.

Por fin el 15 y 16 de setiembre, en fecha que seguramente recordarán con grata emoción sus protagonistas,

se realizan los primeros vuelos solos de los GG/MM Mestre y Araújo.

Este hecho marcó un paso de gran importancia en

la formación del personal de vuelo

de la Aviación Naval Uruguaya.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

En todo su historial dentro de la Aviación Naval no se llegaría a tener durante los vuelos de instrucción con los PT, ningún accidente grave, y seguramente quienes los hayan volado y lean estas páginas, recordarán con alegría y emoción

su primer vuelo solo, el que de por sí marca un importante paso en la carrera de cualquier piloto sea cual sea su especialidad.

 

Para rememorar esa emoción es que a continuación se transcriben los nombres de los pilotos que realizaron ese primer “Solo” a bordo de aquellos Fairchild PT, como forma de revivir ese momento mágico que seguramente no habrán olvidado.
 

  Piloto           

Avión

Fecha                 
 

G/M G. Mestre

 

EE-3

05 de setiembre de 1944

 
 

G/M S. Araújo

 

EE-1

16 de setiembre de 1944

 
 

Asp C. Meza

 

EE-2

03 de diciembre de 1945

 
 

Asp W. Aguirre

 

EE-2

06 de diciembre de 1945

PT-23 EE-2   foto Aviación Naval vía Daniel Wilson

 

Emblema usado en los aviones de la Escuela de Aviación Naval, graficado por Los Cerovaz

 

Asp H. Martini

 

EE-2

14 de diciembre de 1945

 

G/M C. Bernet

 

EE-3

10 de enero de 1946

 

G/M J. Larralde

 

EE-1

22 de julio de 1948

 

G/M A. Noble

 

EE-1

22 de julio de 1948

 

G/M R. Chelle

 

EE-1

16 de agosto de 1948

 

G/M J. Barcena

 

A-201

14 de julio de 1950

 

G/M W. Censato

 

A-201

14 de julio de 1950

 

G/M J. Imizcoz

 

A-203

25 de julio de 1950

 

G/M A. Da Costa

 

A-201

25 de julio de 1950

 

G/M G. Clavelli

 

A-203

27 de julio de 1950

 

G/M D. Bracciale

 

A-203

13 de setiembre de 1950

 

G/M F. Sangurgo

 

A-203

14 de setiembre de 1950

 

G/M E. Morassi

 

A-201

05 de diciembre de 1950

 

A/I C. Garat

 

A-202

15 de diciembre de 1950

 

G/M M. Villagrán

 

A-202

25 de enero de 1951

 

G/M H. Musto

 

A-203

31 de enero de 1951

 

A/I W. Ibarburu

 

A-202

10 de abril de 1951

 

G/M J. Macciolo

 

A-201

06 de febrero de 1952

 

G/M A. Sierra

 

A-201

16 de diciembre de 1953

 

G/M S. Acosta

 

A-201

17 de diciembre de 1953

 

G/M R. Invidio

 

A-201

17 de diciembre de 1953

 

T/I L. Ferreira

 

A-201

27 de setiembre de 1954

 

A/I C. Oreggione

 

A-201

11 de marzo de 1955

 

G/M C. Mimbacas

 

A-203

31 de marzo de 1955

 

G/M W. Perdomo

 

A-203

31 de marzo de 1955

 

G/M R. Palacios

 

A-203

10 de julio de 1956

 

G/M L. Chiaparro

 

A-202

10 de octubre de 1956

 

G/M Y. Ciganda

 

A-204

27 de noviembre de 1958

 

G/M R. Cavalleri

 

A-201

07 de mayo de 1959

 

G/M W. March

 

A-201

07 de mayo de 1959

 

A/N V. Heguerte

 

A-202

17 de junio de 1959

 
 

G/M L. Toletti

 

A-202

17 de junio de 1959

 

 

foto original Diario EL País, vía Julio Salvo

Base Aeronaval Nº 2 circa 1952

 

Durante 1945 la escuela cambia sus instalaciones al Aeródromo Militar Boiso Lanza, unidad principal de nuestra aviación, que por aquellos años aún integraba el Ejército Nacional como Aeronáutica Militar. Recién en 1947 la Escuela de Aviación Naval es trasladada a la recién inaugurada Base Aeronaval No. 2 en el departamento de Maldonado, lugar que se transformaría en su sede hasta nuestros días.

 


PT-23   perfil diseñado por Los CerovazLos PT en nuestra Aviación Naval

Apenas llegados los Fairchild PT a nuestro país, y de acuerdo al momento de conflicto mundial que se vivía, se empiezan a utilizar profusamente en la preparación de los pilotos, que posteriormente serían enviados a los Estados Unidos a los efectos de ser instruidos en disciplinas más avanzadas (los Estados Unidos, por esa época en guerra, exigían a los pilotos becados tener el curso básico de vuelo aprobado para ser aceptados en sus escuelas de vuelo avanzado). A su vez y en forma paralela se utiliza a los PT-23 en tareas como fotografía, enlace, y en alguna oportunidad como transporte de técnicos, que por aquellos años se encontraban abocados al estudio de pistas para los futuros aeropuertos nacionales.

También en alguna ocasión se los destinaría en misiones de búsqueda, como por ejemplo en junio de 1957 en los trabajos tendientes a localizar un avión SNJ, el cual había desaparecido con sus dos tripulantes, el T/N Germán Clavelli y el A/N Juan Barcena, que desgraciadamente nunca fueron encontrados. PT-26   perfil diseñado por Los Cerovaz

En estas operaciones también participaría un Fairchild  PT-26, el que había sido incorporado durante 1951 gracias a una cesión de la Aeronaútica Militar. Esta aeronave, matriculada A-753 y destinada a Servicios Generales, era un modelo igual a los PT-19, con la sola diferencia de que sus cabinas eran cerradas. Este avión participó en la búsqueda del SNJ A-253, y en el aterrizaje al regreso de uno de esos vuelos capotó, en forma tan violenta que el motor quedó prácticamente incrustado en la cabina delantera. Esto produjo la muerte del piloto, el A/N Artigas Sierra, y heridas a su acompañante el Mro. Carlos Andrade.

El destino se ensañaba con los hombres de la Aviación Naval, quienes en el curso de unos pocos días, debían resignarse a la pérdida de tres valiosos compañeros y dos de sus aeronaves. Los accidentes mencionados se produjeron el 20 y 22 de junio de 1957 respectivamente.

De esta forma, los Fairchild PT daban su aporte y cumplían fielmente y con creces sus funciones, no libres de un momento trágico como el descrito.

A partir de 1949-50 se decide el cambio de sus matrículas y cambian su identificación a A-201, A-202 y A-203. Desde ese momento y hasta la fecha todos los aviones navales dedicados a la instrucción llevarían numeración de la centena 200.

PT-19   perfiles diseñados por Los Cerovaz

También en esos años se produce el cambio de los motores radiales Continental, por Ranger L-440 en línea, quedando convertido los PT-23 en PT-19.
Para 1950 se reforzaba la pequeña dotación de aviones de instrucción, con la incorporación de tres aviones North American SNJ, los que luego de sus predecesores PT, darían a los pilotos una formación más adecuada para las múltiples tareas y continuos avances en el campo del equipamiento aéreo.  

Harvard AT-6   perfiles diseñados por Los Cerovaz

(ver el ferry de los primeros SNJ,

en la "Historia de los TBM Avenger")

 

Más de una década seguirían los pequeños PT respaldando las tareas de los robustos SNJ, hasta que al fin y luego de casi 15 años de servicio se decidió su retiro.

Los Fairchild PT –y siempre de acuerdo a los libros de la Aviación Naval- volaron hasta 1959 y 1960. Con esa referencia los últimos datos ubicados por el autor, son los que se detallan a continuación:

 

A-202 23 de setiembre de 1959 T/N Luis Rivero y A/N N. Heguerte
A-203 23 de agosto de 1960 A/N W. Kovachy
A-201 23 de agosto de 1960 T/N Mayo Villagrán y A/N J. Castro Crossa

 

Es posible que luego de esto fueran realizados otros vuelos, pero ha sido imposible acceder a algún registro que lo indique. Asimismo se me informa que los Fairchild PT de la Aviación Naval, luego de su baja del servicio, fueron entregados a la Aviación Militar, y que alguno fue dado en donación, en perfecto estado de vuelo, al AeroClub de Rocha.

De esta forma llegaban a su fin los primeros aviones de instrucción de la Aviación Naval.  Después, por más de 25 años, se seguiría con los SNJ, y a partir de 1966 con los Mentor T-34 en sus modelos A, B y C. En estos días se mantiene la instrucción con los modelos T-34C TurboMentor “Charlie”.

 

Nelson P. Acosta 

 


 

 

(Datos que corresponden al libro “Alas de la Armada”, inédito y de autoría de Alberto Del Pino Menck y Nelson P. Acosta).

Aviones de entrenamiento Fairchild PT-23A SL / PT-19

Estas aeronaves, recibidas en 1943, tuvieron el privilegio de ser las primeras que emplearía la Aviación Naval para adiestrar a sus alumnos pilotos con instructores propios. El PT-23A SL, versión que recibió nuestra Aviación Naval, construida en la planta de St. Louis (de allí las siglas SL), era un avión equipado para el entrenamiento en vuelo por instrumentos. Su planta de poder original la constituía un Continental R-670-11 de 220 HP, que fue luego cambiados por motores lineales Ranger L-440, quedando convertido el avión al modelo PT-19.

EE-1 (luego A-201) Serial Nr. 42-49945
Entra en servicio el 7 agosto de 1944 en un vuelo de prueba tripulado por el T/N Aguirre y el A/N Martínez.
El prefijo EE (por Escuela de Especialización) es el que utiliza al principio.
El 7 de noviembre de 1949 cambia la matrícula a A-201 (A por Armada, y 200 por la centena adjudicada a las aeronaves de instrucción)
El último vuelo con este aparato se realizó el 23 de agosto de 1960.


EE-2 (luego A-202) Serial Nr. 42-49946
Entra en servicio el 5 de setiembre de 1944, en vuelo de prueba realizado por el T/N Cabrera.
Cambia la matrícula el 16 de agosto de 1949 por A-202.
Ultimo vuelo el 23 de setiembre de 1959.


EE-3 (luego A-203) Serial Nr. 42-49947
Entra en servicio el 7 de agosto de 1944 en vuelo de prueba realizado por el T/N Cabrera y el G/M Fernández.
Nueva matrícula A-203 el 16 de agosto de 1944.
El último vuelo registrado corresponde al 23 de agosto de 1960.


A-204 (ex FAU 650, originalmente PT-26, convertido a PT-19)
Este PT-19, cedido por la Fuerza Aérea Uruguaya, fue incorporado el 3 setiembre de 1958.
Primer vuelo se registra el 11 de setiembre de 1958 como un vuelo de prueba con el T/N H. Musto y el G/M L. Toletti.
Último vuelo registrado el 22 de setiembre de 1960 piloteado por el C/C Celestino Meza.

 

Avión de propósitos generales Fairchild PT-26A-FE “Cornell II”

Construido por la Fleet (FE) para la Royal Canadian Air Force, que lo había bautizado “Cornell II”, llevaba un motor Ranger L-440C-7 de 200 Hp. Un único aparato de este modelo, cedido por la Aeronáutica Militar, prestó servicios en la Escuadrilla de Servicios Generales de la Aviación Naval.

A-753 (ex FAU 676) Serial Nr. 42-71176
El 9 noviembre de 1951 se realiza el vuelo de transporte desde Boiso Lanza hasta la Base Capitán Curbelo, siendo tripulado por el A/N Gustavo Mestre y el C/I Matías Scherschener. El avión había sido entregado a cambio de diversos repuestos.
El A-753 culminó trágicamente su vida de servicios en la Aviación Naval, al accidentarse en junio de 1957, causando la muerte de su piloto, A/N Artigas Sierra, y heridas a su acompañante, el Mro. Andrade.

 



Bibliografía:

Revista “Barlovento” Año 1956.
“Aportes para la historia de la FAU” Cnel. Jaime Meregalli y Sgto.1º Carlos L. Bernasconi.
“Cazas 1939-45” Kenneth Munson
Diario “El País” (Biblioteca Nacional)

Entrevistas:

C/N Omar Aguirre
C/N Miguel Cabrera
C/N Sarandí Araújo
C/N Gustavo Mestre
C/N Matías Scherschener
C/N Reclus Cavalleri

Agradecimientos:

Escuela de Aviación Naval

C/N Juan P. Trabal

Perfiles:  Los Cerovaz

 

Edición y diseño web: Pilotoviejo

 

 



publicado en Memorias del Tiempo de Vuelo

www.pilotoviejo.com

en noviembre de 2007